La seguridad en internet y los programas para proteger tu computadora y correo electrónico se vuelven más sofisticados todos los días, pero no funcionan si abres la puerta a los estafadores que intentan burlarlos con el fin de obtener información confidencial. A esto se le conoce como phishing y he aquí algunos consejos de Viasat para ayudarte a evitarlo.
El phishing es una forma común de fraude en internet en el que los delincuentes en línea usan el correo electrónico o la mensajería instantánea para obtener información personal, como nombres de usuario y contraseñas. Por lo general, un phisher se presenta como una persona o institución de confianza, como tu banco, tu proveedor de servicios de internet (ISP) o incluso un amigo, para engañarte y que compartas esa información. Incluso ha habido estafadores que se hacen pasar por personal de Viasat.
Un correo electrónico de este tipo te hace creer que debes verificar tu cuenta o confirmar alguna información de facturación relacionada con tu tarjeta de crédito o cuenta de PayPal. Al hacer clic en el enlace o enviar la información de identificación solicitada, el phisher puede acceder a tus cuentas.
Es buena idea pensar antes de hacer clic en cualquier enlace, ya que abundan las trampas y cuando menos te lo esperas puedes caer (hasta los que dicen “esto nunca me va a pasar” caen). Recuerda este y otros consejos, incluso cuando abras un correo electrónico de una dirección que reconozcas:
- En lugar de hacer clic en un enlace enviado por correo electrónico, escríbelo en tu navegador web. También puedes pasar tu puntero sobre él para obtener una vista previa de la dirección antes de hacer clic. Esto es porque el texto que ves en el correo suele ser idéntico al de una institución real. Así mismo, los enlaces de estafadores a menudo tienen direcciones de aspecto extraño en comparación con la dirección típica de “institucionreal.com”.
- Evita completar formularios que soliciten información personal o confidencial.
- Navega solamente por sitios web seguros para transacciones en línea; puedes identificarlos por el icono de “candadito” que aparece junto a la barra de dirección de tu navegador. Si de todas formas no estás seguro, haz clic en el icono de candado para verificar el sitio.
- Busca las letras “https” en la URL de un sitio web. La “s” significa seguridad y significa que toda la información que envíes se cifrará primero.
- Si de todas formas un sitio te parece sospechoso, haz negocios “a la antigua”: levanta el teléfono.
- Verifica tu antivirus para asegurarte de que está actualizado. La mayoría tiene actualizaciones y mejoras automáticas, pero echa un vistazo para asegurarte de que se están haciendo.
- Piensa que tu dirección de correo electrónico personal es como tu dirección física y solo compártela con aquellos en quienes confías. Y si aún no tienes una dirección de correo electrónico personal alternativa, abre una para suscribirte a boletines, recibir cupones y avisos de tiendas, y compartir otra información no personal.
- Si no reconoces al remitente, no respondas. Incluso responder para darse de baja del correo no deseado podría exponerte a más correo no deseado. Mejor etiqueta el correo electrónico como “basura” o “spam” y verifica el nivel de tu filtro de “spam” de vez en vez.
- Utiliza una contraseña segura. Éste es el tip más antiguo y confiable que tenemos para mantenernos seguros en línea, y es por eso que vale la pena repetirlo una y otra y otra vez: mezcla números, letras y símbolos en tu contraseña, luego anótala y guarda todas tus claves de acceso en un lugar seguro.
Implementar estas soluciones no lleva mucho tiempo y vale la pena el esfuerzo si lo comparas con los problemas que conlleva el robo de indentidad. ¡Navegar en línea con seguridad es fácil!